Juan Pablo Robles / Gestión

Durante años y hasta la actualidad la mayoría de personas siempre relacionan  los videojuegos como un simple ocio, pérdida de tiempo o incluso la razón de tantos actos violentos en colegios o adolescentes  desquiciados que salen a la calle con armas.  Esperaba la misma respuesta sobre el asesino del centro comercial de Independencia, pero hasta el momento solo  el instituto Noguchi da a entender que el asesino era un “aficionado al género musical metal y a los tatuajes”. Si esta conjetura fuera cierta, nuestro gran músico y youtuber Charlie Parra sería un asesino en serie y de los internacionales.

Por tal razón decidí llamar a Charlie:

“Es primera vez que sucede en el Perú, suele suceder en Estados Unidos pero no aquí y lo peor es que incluso hay gente que lo toma con humor, he visto memes en Facebook comparando imágenes del asesino con el videojuego Counter Strike. Ahora, que lo relacionen con la música… ¿bajo qué justificación se basan? Es decir, ¿dar a entender que es un asesino porque tiene tatuajes y le gusta el metal? entonces quienes escuchan reguetón son abusadores de mujeres. Son prejuicios muy mal desarrollados. La verdad es que Lima todavía no está lista para  los tatuajes o este tipo de género musical, incluso hasta el tener cabello largo  lo relacionan con la homosexualidad y la verdad es que hasta ahora no conozco a ningún gay con el pelo largo. Hace siete años había personas que pensaban que yo había estado en la cárcel o en alguna pandilla. A veces el sensacionalismo genera ignorancia.  Si alguien se hace un tatuaje de  Mario Bros es un asesino,  que se pregunten entonces qué escucharán los religiosos pedófilos, dudo que sea Master of puppets, probablemente el coro de niños de Viena y la mayoría de políticos corruptos, quienes realmente dañan al país, normalmente son de la Nueva Ola”.

Cada vez que sucede un acto de esta magnitud y se vuelve mediático (sabemos que no todas las catástrofes mundiales llegan a nuestros medios, peor con las cadenas de FB sobre conflictos armados) me entrevistan  y finalmente comento que tuve la suerte de probar los videojuegos desde que tengo uso de razón y hasta ahora no tengo ningún impulso violento o trastorno mental y menos afectaron mis calificaciones académicas. Razón por la cual desarrollo una tesis de videojuegos. Algo que en Perú, por ahora todavía no es muy viable.

Menciono la palabra viable desde el principio de una investigación en la cual se necesitan fuentes y recursos no solo físicos como libros o digitales sino también ambientes o espacios desarrollados para el óptimo trabajo. Cuando entré a la biblioteca de la UCM quedé impactado no solo por los textos que se pueden conseguir, sino también porque en la sección audiovisual hay desde el cine mudo y clásicos de Chaplin como las temporadas de Game of Thrones y los Simpson. Pero más sorprendente y la razón por la cual puse la cara de Forrest Gump fue al ver videojuegos y espacios para probarlos.

Pensaba que era algo de pocas bibliotecas pero hace días me percaté que todas tienen secciones de videojuegos. Es decir un concepto que muchas personas pueden pensar absurdo (relación biblioteca-videojuegos) es una realidad y es parte de la educación, porque sí, y lo afirmo, existen juegos que educan.

La Universidad Estatal de Carolina del Norte cuenta con un área especializada para el trabajo y uso de videojuegos, con ambientes increíbles y una lista de videojuegos para reservar con tiempo. Universidad que visitaré a finales de año como parte de la investigación de tesis.Es imposible negar la importancia de los videojuegos en la educación gracias a la evolución de las TIC´S encontramos proyectos como los de One Lap Top Per Child, o los de la generación de los ochentas quienes aprendimos inglés por los Roll Player Games RPG.

Como  último punto, hace algunos meses invité a Charlie a dar una clase sobre comunicación digital y los estudiantes aprendieron mucho sobre posicionamiento en web y no… no hubo ningún muerto.

Fuente: Diario Gestión / Lima, 25 de febrero de 2017